El aniversario de la declaración de independencia de nuestro país nos ubica en un escenario de reflexión y evocación sobre los hitos históricos que continúan actuales, interpelados en forma recurrente desde el presente, entrelazados en el proceso de construcción de nuestra identidad que aspira a ser cada vez más libre y democrática.
El concepto de independencia traspasa las décadas y va ganando histórica y culturalmente, un valor insoslayable que provee a los pueblos y naciones de una identidad que los hace ser y pertenecer a un territorio, con sus propias leyes y sus propias costumbres. La independencia en su sentido más general implica la libertad, y por eso en una cultura de paz es indispensable que todos sean libres, hombres y pueblos, por lo que la independencia debe ser un valor muy importante a desarrollar en todos los países, pues solamente cuando todos son independientes puede haber una verdadera paz.